Almohadilla térmica cervical

Existen en el mercado diferentes tipos de elementos que nos ayudan a mejorar nuestros problemas cervicales, los cuales son muy comunes en los días que corren con todo el stress y ritmo de vida que se acostumbra en la vida moderna.

Si bien hay problemas que son mucho más graves en los cuales se deben llegar a soluciones extremas como cirugías o rehabilitaciones, para aquellos problemas menores existen algunos métodos de terapia para mejorar estas molestias; uno de ellos es el uso de una almohadilla térmica cervical.

El mismo puede ser un tratamiento más que eficaz siendo que el calor alivia mucho los dolores en la espalda, pero por supuesto, no los curara. Básicamente la acción de estos elementos radica en la relajación de los músculos, provocando una reducción en los espasmos del dolor y de esta manera facilitan la posibilidad de elongación de los tejidos que se encuentran lastimados, de manera que se pueda reducir su contracción.

El calor que emiten estas almohadillas estimulan los receptores sensoriales, de manera tal que los mismos disminuyen las señales de dolor que son enviadas al cerebro como mencionamos en otros artículos de nuestro sitio. Si bien utilizar una almohadilla térmica no es demasiada ciencia, es importante que se tengan en cuenta algunos detalles importantes. Por ejemplo, sería bueno que antre tu piel y la almohadilla, coloques una toalla con el fin de evitar quemarte cuando la almohadilla caliente mucho. No se recomienda utilizarla más de 20 minutos por sesión y por supuesto, nunca te vayas a quedar dormido con la misma encendida en la cama.

Puntos importantes

Otro punto importante a tener en cuenta es que una almohadilla térmica cervical no debe usarse durante las primeras 48 horas de haber sufrido algún tipo de lesión; además cabe destacar que si la zona que se encuentra con dolor está inflamada o con algún golpe, lo mejor es que no la uses debido a que estas almohadillas provocan un aumento en la circulación.

Al mismo tiempo, ten en cuenta que no puedes usar una almohadilla térmica cervical sobre una herido que se encuentra expuesta bien si tienes problemas tales como la diabetes, trombosis, dermatitis o cualquier tipo de enfermedades cardiovasculares. Es importante que antes de utilizar una almohadilla de este tipo consultes con los médicos que te están tratando por tu problema, especialmente si tienes algún problema de hipertensión.

Existen diferentes modelos y tipos de almohadillas térmicas para las cervicales; en su mayoría las mismas son de calor seco o húmedo, eléctricas que poseen un control de temperatura para poder regular la intensidad del calor. Generalmente se recomienda que las almohadillas con microondas se utilicen con precaución ya que es fundamental evitar las quemazones. Por lo general pueden encontrarse en tiendas ortopédicas o bien, en tiendas especializadas en colchones y almohadas y los precios son también son bien variados.

Puedes encontrar almohadillas desde los 10 dólares hasta los 50 dependiendo las características de las mismas. Pero recuerda que siempre debes usarlas con moderación y responsabilidad. Por lo general los dolores disminuyen considerablemente pero recuerda que el fin de este tratamiento no es para curarte los problemas que tengas en le espalda o en las zonas musculares donde presentes dolencias, y es una de las mejores alternativas a los placebos con los cuales la mayoría de las personas suele auto medicarse con todos los problemas secundarios que puede llegar a acarrear este tipo de cosas. De todas maneras recuerda que puedes buscar información acerca de las especificaciones de cada almohadilla térmica cervical en internet y en las páginas de las empresas que las venden incluso también puedes comprarlas de manera online.