Carillas dentales

Realmente, son muchas las alternativas con las que contamos hoy en día para que nuestros dientes se vean bien, y podamos lucir una amplia sonrisa, sin miedos, porque las nuevas tecnologías, y la mano de los profesionales ha avanzado mucho en este, como así también en otros planos de la estética y la medicina, así que hoy no es imposible que aunque pasen los años, nuestra dentadura luzca como lo hacía a los veinte años.

En esta oportunidad, nos vamos a referir al tema de las carillas dentales, después de una serie de artículos referidos al tema de la ortodoncia, aquí veremos los tipos de carillas que podemos encontrar, y en qué circunstancias son usadas por los profesionales. Podemos hablar de boom, o de moda, lo cierto es que las carillas dentales, son una de las alternativas más usadas en la odontología de hoy.

Estos elementos no son para nada nuevos, aunque esto se haya convertido en una moda, porque aparecieron en los años 30, que era una alternativa rápida para actores y actrices del cine y la televisión, que deseaban una sonrisa dotada de hermosura, y blanca, con la única diferencia que se colocaban por un tiempo, porque no se podían adherir en forma permanente.

Las carillas dentales, son finas láminas de muy poco espesor, y con ellas se cubre toda la superficie de un diente a reparar, y para colocarlas, simplemente el médico pule y desgasta un poco la pieza a cubrir, y se adhiere de manera instantánea. La adhesión es tan potente que solo se podrá quitar si se fractura, o recibe un golpe fuerte. Son coberturas que tienen las mismas tonalidades de los dientes, para que estos se vean naturales, y son colocados de manera tal, que a simple vista cambian la forma, permitiendo que se vean más grandes y parejos, tanto en color como en la forma. Permiten que los rostros luzcan más jóvenes, y cambian la apariencia del paso de los años. Y si crean una apariencia natural, deslumbrante y nos permite imitar las características de los dientes sanos, porqué no preguntar al odontólogo sobre ellas.

Tipos de carillas dentales

Es importante que mencionemos los diferentes tipos de carillas dentales, por ejemplo las de porcelana, que son las carillas tal vez más duraderas, siendo estas bastante delgadas, porque una vez que se las ha colocado en el diente se vuelven más duras, y fuertes. Es increíble que si las cuidamos nos suelen durar más de diez años, y eso es mucho por tratarse de una de las alternativas.

Entre los cuidados se encuentran no morder elementos duros, utilizar cepillos de dientes de pelo medio, higienizar los dientes todos los días, y evitar golpes. Si la preocupación sobreviene del gastado, eso realmente no es problema, porque es muy poco lo que se necesita para adherir la pieza con el diente, además protege el esmalte dental por mucho tiempo. Otro de los tipos de carillas dentales, son las de resina, que pueden durar muchos años como las de porcelana, pero siempre hay que tener en cuenta el cuidado y la higiene, como en el caso anterior.

En todos los casos las carillas dentales, crean un aspecto juvenil en el rostro, imitando perfectamente el esmalte dental. Para la colocación de una o de otra, es importante que sepamos que debemos hacer varias consultas al médico odontólogo, que entre ambos discutirán sobre el color, el tamaño y el material que mejor le convenga al paciente, también sobre precios y formas de pagos. Se tomas moldes para saber a ciencia cierta sobre el tamaño de los dientes, esa réplica es muy importante, porque se lo envía al laboratorio dental, experto en carillas dentales.

Son muchos los problemas que se pueden subsanar con este tipo de elementos, por eso es que se lo llama muchas veces ortodoncia instantánea. Por ejemplo dientes demasiado pequeños, separaciones exageradas, diente roto, o varios dientes rotos, manchas exteriores, dentadura delantera torcida, y un sin fin de problemas que se pueden reparar por lo menos disimular. Y cuando decimos disimular, no estamos diciendo que reparan los problemas de base, ellos siguen allí, pero constituyen un alivio, por lo menos hasta que nos decidamos a hacer una ortodoncia más profunda y reparar alinear, y modificar las estructuras de nuestros dientes.

Todo este tema de la ortodoncia, y la colocación de este o de otro sistema, será discutido en los consultorios de nuestros ortodoncistas, para llegar a la conclusión que realmente vale la pena, porque las carillas dentales, no son recomendadas en todos los casos. Por ejemplo si poseemos una dentadura enferma o poco saludables, como caries dentales, deben ser arregladas antes de la colocación de ellas, o cuando tenemos dientes desgastados, o muy debilitados, en los casos de bruxismo, que es cuando el paciente rechina sus dientes, no está recomendado porque indudablemente se producirá un desgaste continuo y la carilla se romperá, malas mordidas, dientes desalineados, etcétera, son unos de los problemas en los que no estaría recomendada esta solución.