Rinitis crónica
La rinitis, es una enfermedad muy frecuente en todo el mundo, y hay tres tipos bien definidos de ella, la rinitis crónica que es de lo que nos ocuparemos aquí, la rinitis aguda y la estacional, para reconocerla necesitamos saber y conocer los síntomas, las causas, y los tratamientos que se siguen para controlarla.
Los síntomas son: nariz inflamada, un flujo nasal bastante importante, repetición de estornudos, picazón nasal, y zona de la nariz enrojecida, obstrucción, picazón de garganta. Así que como vemos, es fácilmente reconocible el tema de los síntomas, y en las personas particularmente sensibles de da mas, que en otras. Cuando esto se repite año a año, y en casi todos los cambios de temperatura, el paciente se ve obligado a la consulta con el especialista para poder llevar a cabo un tratamiento.
Si tenemos que hablar a cerca de las causas de una rinitis crónica, diremos que en primer lugar, la genética juega un papel fundamental, en pacientes, con antecedentes de familiares alérgicos, asmáticos, o que tienen directamente rinitis crónica, pero los factores ambientales, clima, temperatura, vivienda, trabajo, y estados emocionales, puede incrementarla o disminuirla.
Veamos los factores ambientales que tienen incidencia: la humedad, los climas muy fríos, o de cambios bruscos de temperatura, son enemigos de las rinitis, como así también las actividades que realizamos a diario, por ejemplo el contacto directo con productos químicos, como pinturas, aerosoles, harinas, polen, aserrín, etcétera, incrementan los síntomas, llevando al paciente a un círculo vicioso que los obliga a comenzar con el tratamiento.
La diferencia que existe entre la rinitis crónica, con la rinitis estacional o aguda, es que en el caso de la segunda solo se da en las épocas en los que los cambios de temperatura son bruscos, la extrema humedad de ciertas épocas del año, la polinización de las flores, espacios poco ventilados, etcétera, y en el caso de las crónicas el paciente siempre está congestionado, sin importar ni el clima, ni los cambios, ni el medio en el que vive o trabajo a eso se llama rinitis crónica, aunque en circunstancias específicas puede hacer cuadros virales y cuadros de asma bronquiales.
¿Cómo reconocerla?
Es fácilmente reconocible a persona que tiene rinitis, porque sus ojos siempre están enrojecidos, tienen picos de nariz, y paladar medio superior, garganta irritada, estornudos recurrentes, con lo que su calidad de vida se ve afectada en gran medida.
Cuando un paciente llega al consultorio de un especialista, éste debe hacer una serie de preguntas para descartar asma bronquial, u otras patologías, para ello preguntas a cerca de los síntomas, cuando se dan, si es solo en el ámbito laboral, o en la vivienda, si solo se refieren a los cambios de temperatura, o a la primavera, todas estas preguntas le dan la pauta al médico, si el paciente que hace la consulta es un paciente de rinitis crónica, o estacional. Es una de las enfermedades más estudiadas, sobre todo en la rama infantil, porque los más pequeños pueden sufrir cuadros asmáticos, o brotes de bronco espasmos, muy severos, que necesitan internación en la mayoría de los casos. Aunque no necesariamente las rinitis crónica deriven siempre en un cuadro de asma, suele rondar el fantasma por el temor que esa causa en quienes lo padecen.
Dentro de los tratamientos más comunes se encuentran las series de vacunas, para verificar el orígen de la misma, ejercicios físicos, como la natación, la gimnasia aeróbica, las caminatas al aire libre, medicación específica, como los inhaladores, nebulizaciones, etcétera, pero todo debe estar vigilado bajo la prescripción médica, y las visitas al especialista, que además pedirá análisis de sangre, radiografías de tórax, y de nariz, verificación de la función pulmonar, y otros estudios más complejos, para descartar otra patología más grave.
La rinitis crónica, es una enfermedad muy frecuente, pero no por ello se debe dejar sin tratamientos, o por lo menos seguir una serie de instrucciones que los médicos harán en la forma oportuna, para que tengamos una mejor calidad de vida o que los síntomas no sean tan importantes que perjudiquen la comunicación, el trabajo, y el estudio de quienes a padecen.
Rara vez se presentan con fiebre, pero suele suceder que estos cuadros de rinitis crónica encubran virus estacionales, que cuando ello ocurre el paciente se siente realmente mal, deprimido, sin fuerzas, y un decaimiento generalizado, que provoca la consulta al médico en todos los casos. Es en estos cuadros que el médico recetará antihistamínicos, nebulizaciones con alguna droga de apertura de bronquios, y reposo absoluto, pero por suerte son cuadros pasajeros que no duran más allá de los cuatro o cinco días. Cuando padecemos rinitis crónica, debemos tener un médico de cabecera que nos indique qué hacer en las épocas en las que la enfermedad puede empeorar, qué tratamientos son los más adecuados de acuerdo al cuadro, de cada paciente.
|